La vitamina D para bebés, recién nacidos y niños mayores, tanto de fuentes dietéticas como de suplementos, es esencial. El nivel apropiado en el cuerpo determina, entre otros el correcto desarrollo óseo. La deficiencia de vitamina D en un niño lo expone a una serie de disfunciones, por lo que mantenerla normal debe ser una prioridad.
¿En qué se encuentra la vitamina D y cuál debe ser la dosis para la suplementación?
A continuación, te responderé esta y otras más interrogantes que debes despejar, así que te recomiendo que te quedes y disfrutes del contenido que tengo para ti:
Vitamina D3 y vitamina D2 – formas de vitamina D
Mantener el nivel de vitamina D del cuerpo en el rango normal es muy importante para el buen funcionamiento del cuerpo y el mantenimiento de la salud humana.
A pesar de la enorme cantidad de información, es difícil entender en qué se diferencian las diferentes formas de esta vitamina y dónde se puede obtener. Las formas de vitamina D que podemos aportar con los alimentos son la vitamina D3 – colecalciferol y la vitamina D2 – ergocalciferol. El primero se encuentra naturalmente en organismos animales, el segundo se encuentra en hongos y levaduras.
La vitamina D3 también se puede formar en la piel a partir de la provitamina (7-dehidrocolesterol) bajo la influencia de los rayos ultravioleta, es decir, la exposición al sol. Para los adultos, la síntesis de colecalciferol en la piel es lo más importante. Tras ser absorbidos por la sangre, ambos se transforman en un compuesto que tiene un efecto positivo en la salud. Tanto el colecalciferol como el ergocalciferol se convierten en el cuerpo en calcifediol (otro nombre es 25 [OH] D) y luego en calcitriol (también 1,25 [OH] 2 D). Estos dos últimos compuestos son las formas activas más conocidas en las que se produce la vitamina D. La norma oscila entre 30-80 ng/ml.
Propiedades de la vitamina D – funciones en el organismo
Los receptores de calcitriol se encuentran en casi todas las células del cuerpo. Esto significa que es necesario para su funcionamiento. Aunque el papel y las propiedades de la vitamina D (y sus formas) aún no se conocen por completo, se sabe que están involucradas en:
- Mineralización ósea
- Absorción de calcio y fósforo
- Metabolismo del hierro
- Síntesis de proteínas que forman parte del hueso
También tienen un efecto antioxidante
Deficiencia de vitamina D – Efectos en los niños
Además, la importancia de su papel se evidencia por los efectos de la deficiencia de vitamina D. Un nivel demasiado bajo de esta vitamina puede causar desmineralización de los huesos, que se manifiesta en niños con raquitismo, lo que a su vez conduce a trastornos de la mineralización de los dientes, y durante los primeros 6 meses de vida también provoca convulsiones y tetania. Una vez terminado el esqueleto, la falta de vitamina D provoca osteomalacia (ablandamiento de los huesos) con dolor óseo y debilidad muscular.
Además, los niveles bajos de vitamina D también conducen a una mayor susceptibilidad a las infecciones, a los trastornos de la inmunidad, probablemente en cierta medida pueden contribuir al desarrollo de enfermedades autoinmunes y diabetes tipo 2, y también pueden contribuir a la formación de cáncer. Debido al riesgo de cantidad insuficiente de este compuesto en el cuerpo y los efectos graves que pueden ocurrir en el futuro, es importante que cuides el nivel adecuado de vitamina D en el cuerpo del niño desde los primeros días de vida.
¿En qué se encuentra la vitamina D?
La vitamina D es liposoluble. Se encuentra en pequeñas cantidades en los alimentos. Sin embargo, una muy buena fuente de vitamina D para los niños son los pescados grasos y los aceites de pescado en forma de aceite de hígado de bacalao. Además, esta vitamina se puede encontrar en la yema de huevo, productos lácteos enteros, aceites vegetales. Hay que recordar elegir los aceites más saludables, que además serán fuente de ácidos grasos saludables. Vale la pena comprar aceite de oliva, aceite de linaza, aceite de cártamo, aceite de colza. Es bueno si serán prensados en frío, los llamados «Extra virgen.»
Al considerar dónde se encuentra la vitamina D en el contexto de la dieta de un bebé, vale la pena saber que también se agrega a productos alimenticios básicos, como, por ejemplo, leche modificada, cereales y margarina. Desafortunadamente, incluso la leche materna o la leche de fórmula no garantizan el mantenimiento de niveles adecuados de vitamina D. Por lo tanto, debe seguir las recomendaciones y dosis de los suplementos que lo contienen.
Demasiada vitamina D en bebés y niños provoca un llamado efecto tóxico que se manifiesta en debilidad, pérdida de apetito, dolor abdominal, diarrea y dolores de cabeza. Sin embargo, sería muy difícil tener una sobredosis de vitamina D a través de la comida. Una dieta rica en vitamina D no le hará daño a tu bebé, pero también será difícil cubrir las necesidades del mismo. No obstante, debes darle a tu hijo estos productos, tanto en los meses de verano como de invierno.
Ciertamente, tal dieta también apoyará el desarrollo del niño pequeño. Quizás, si un niño pasa mucho tiempo al aire libre en días soleados y además consume alimentos ricos en vitamina D, se evitarán las carencias. Sin embargo, para estar seguro del nivel de este compuesto en el cuerpo, debe controlar anualmente la vitamina D de tu hijo.
Suplemento de vitamina D – dosis para niños
Debido a la frecuente aparición de deficiencias de vitamina D en nuestra latitud, se recomienda a los niños tomar suplementos de vitamina D para prevenir el raquitismo y la osteomalacia. Antes de iniciar la administración de suplementos con vitamina D a tu hijo, debe consultar a un médico y comprobar el nivel en el organismo. Los niveles de calcifediol y calcitriol son actualmente los más comúnmente analizados para verificar los niveles de vitamina D. Determinar el nivel de vitamina D sin cambios solo es un método muy poco confiable y no indica sus reservas reales en el cuerpo.
Sin embargo, antes de elegir la prueba, debes hablar con tu médico, quien te ayudará a elegir el indicador apropiado. El nivel de vitamina D en un niño debe medirse después del período de verano, cuando, gracias a los rayos del sol, somos capaces de producir y almacenar su suministro para el otoño y el invierno. Lo mejor es hacer la prueba antes de iniciar la suplementación.
No excedas la dosis sugerida a menos que tu médico se lo indique, porque a diferencia de la vitamina D dietética, este suplemento puede tener una «sobredosis» y causar un efecto tóxico.